viernes, 23 de enero de 2009

El crédito y el más allá

Las creencias en una vida después de la muerte nos llenan de esperanza, precisamente con una de las cosas más trágicas que tiene la existencia y que es la muerte.

Como idea es bastante insostenible, no existe ninguna prueba mínimamente aceptable de que haya otras vidas anteriores y posteriores a la actual, pero el hecho es que de todos modos, personas inteligentes, suficientemente informadas, con una racionalidad bien desarrollada, igual se permiten albergar este tipo de esperanzas.

Sin embargo, dentro de nuestra existencia objetiva y tangible (la actual), existe un fenómeno que se le parece bastante y que puede ser interesante reconocerlo como tal.

Cuando alguien compra un bien a pagar en el futuro, lo que está haciendo es disfrutarlo antes de haber generado los recursos que habrán de convertirlo en propio.

Si compramos un inmueble con la promesa de pagarlo en cuotas mensuales durante los próximos 25 años, de alguna manera estamos viviendo hoy una vida futura. Esto es real, no es una ilusión ni una creencia.

Cuando aún no se habían inventado los préstamos hipotecarios, las personas tenían que ahorrar mes tras mes una parte de sus ingresos para finalmente, al cabo de muchos años, hacer esa compra al contado. Sin este producto financiero (préstamos hipotecarios) primero había que «vivir trabajando» para luego disfrutar la casa propia.

Los préstamos hipotecarios nos permiten vivir hoy una vida futura, contando con que habrá un más allá, claro que en ningún caso figura la muerte. Es un más allá de hoy, no un más allá de la muerte.

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21 comentarios:

Anónimo dijo...

El tema de la reencarnación no es como Usted lo plantea; tendría que informarse más.

Anónimo dijo...

Omite un dato más que importante.
Esta diferencia en el tiempo hay que pagarla. Los intereses hipotecarios SON MONSTRUOSOS!

Anónimo dijo...

A veces tenemos que evaluar los pro y los contra de cada cosa que se elige. Los intereses serán MONSTRUOSOS como dice el señor Diez pero de otra forma habría que esperar 20 pagando un alquiler que es dinero que se va por el fregadero.

Anónimo dijo...

Todos tienen un poco de razón: Es cierto que acá no se dice que el alma vive 'varias veces' en diferentes cuerpos, es cierto que los intereses son elevadísimos, es cierto que uno se rompe el alma para pagarla y tb es cierto que esa casa uno la paga 'varias veces' de tan cara que le sale.

Anónimo dijo...

Me hizo acordar y se lo reprocho. Cuando habían transcurridos no sé si tres o cuatro años de pagos puntuales, se me ocurrió preguntar cuánto debía, Y DEBÍA MÁS QUE AL PRINCIPIO!!! Lo juro por ésta!

Anónimo dijo...

Quizá no le interese a nadie, pero los préstamos con tasa de interés compuesta (que calcula "intereses de intereses") resultan muy caros si son a más de un año de plazo.

Anónimo dijo...

Es más caro, cierto, pero lo que no hay que olvidarse es que cuando se compra pueden hacerse mejoras que quedarán pero si se alquila, no se harán mejoras y viviremos un poco peor.

Saludos

Anónimo dijo...

En cualquier financiación uno gasta lo que todavía no ganó. No tiene por qué ser una préstamo de vivienda.
Rescato si que ud pone acá que en una financiación uno 'vive' lo que todavía no vivió.
Esto esta interesante.
Saludos en gral.

Anónimo dijo...

Acordemos que sobre la vida después de la muerte tampoco existen pruebas concluyentes sobre su inexistencia.

Anónimo dijo...

Pero Beatriz, con ese razonamiento podemos creer y asegurar práctiamente cualquier cosa!

Anónimo dijo...

Mirando pro y contra, me quedo a favor de los préstamos hipotecarios. Aspirar a la vivienda propia es natural en países como el nuestro, donde el alquiler se lleva una buena parte de los ingresos.

Anónimo dijo...

Si creyera en una vida después de la muerte sería tan maravilloso que seguramente no habría argumento para convencerme de lo contrario.

Anónimo dijo...

Abrir un préstamo hipotecario es similar a tener relaciones sexuales prematrimoniales.

Anónimo dijo...

Es más fácil ahorrar para pagar que ahorrar para comprar. Hay que reconocer que sin la obligación el ahorro exige mucha disciplina.

Anónimo dijo...

No estoy en condiciones de heredar deudas y al mismo tiempo me da mucha bronca que se pierda el esfuerzo que hizo mi madre durante tantos años.

Anónimo dijo...

Una vida después de la muerte no me atrae demasiado. No creo que en el Cielo se consigan buenos abogados.

Anónimo dijo...

¿Qué aspecto tiene la racionalidad bien desarrollada?

Anónimo dijo...

Ahorrar con el diezmo exige una fe inquebrantable!

Anónimo dijo...

La mayor parte del tiempo vivimos una vida futura porque mucho más que la mitad del día nos estamos preparando para algo que va a venir.

Anónimo dijo...

Dígame ya donde puedo comprar inmuebles con una promesa...hasta ahora lo único que pude concretar de ese modo fue mi casamiento.

Anónimo dijo...

Me parece un tanto estrecho de mente pensar que quienes creemos en vidas pasadas o futuras, simplemente lo hacemos por tener esperanzas en algo.Además menospreciar a las personas "inteligentes e informadas" por tener creencias espirituales. Tampoco me agrada. Yo respeto tus ideas. Respeta las mías. Además en ese caso sabemos de sobra que no vamos a precisar un crédito hipotecario ni comprar una casa pues ni la traemos ni la llevamos. No hay pruebas de muchas cosas y no, por ello dejan de existir o ser. Es cuestión de pensarlo. Besitos para ti Fer. De la Brujita.