lunes, 17 de mayo de 2010

La violenta violación educativa

Nuestra única misión consiste en defender la vida de la especie (1), para lo cual debemos cuidar a los que ya nacieron y tratar de generar nuevos ejemplares que reemplacen a los que inevitablemente iremos muriendo.

Por lo tanto, es legítimo afirmar que los sentimientos más importantes son el amor hacia lo que contribuya a cumplir la misión y el odio a todo lo que obstaculice su cumplimiento.

Desde este punto de vista, la sexualidad es la función esencial para el cumplimiento de la única misión, porque contiene el amor con el cual nos unimos para fecundarnos y el odio (agresividad) con el cual nos defendemos.

Los términos amor y odio se corresponden con las expresiones atracción sexual y rechazo sexual .

La educación forma parte de la única misión, porque para poder conservarnos y reproducirnos, tenemos que aprender a trabajar para conseguir los recursos que demanda existir.

Por lo tanto, la educación obtiene energía del amor y de la sexualidad.

La pasión por saber, por desarrollar destrezas, por satisfacer la curiosidad, el deseo de producir, de crear, inventar, descubrir, son impulsos amorosos y sexuales (aunque no genitales).

Para aprender, el alumno debe estar motivado para estudiar. Tiene que estar predispuesto a incorporar las ideas, nociones y datos que se le ofrecen.

Sin embargo, la cultura hace algo indebido.

Los sistemas educativos no piden el consentimiento a sus alumnos y —aunque sé que suena descabellado—, violan al estudiantado cuando imponen temas que no interesan a todos.

Los fracasos estudiantiles se explican como incompetencias de alumnos y/o profesores, pero la dificultad está en que sólo podemos aprender por amor a lo que nos gusta, nos atrae y nos excita.

Lo que no sea así, es una violación que genera la natural resistencia que llamamos fracaso escolar.

(1) Ver blog La única misión

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14 comentarios:

Lucrecia dijo...

Summer Hill es la respuesta.

Anónimo dijo...

Me cuesta aprender. Quizás haya perdido la capacidad de disfrutar.

la gordis dijo...

Cualquier cosa que deba incorporar me da un poco de miedo. Ya la comida me hizo mucho daño.

Ingrid dijo...

Para que se elijan temas que les interecen a todos hay que agrupar a los alumnos por centros de interés.

Marta dijo...

Recién tenemos la posibilidad de elegir estudiar lo que nos gusta en la Universidad o en las Escuelas de Artes y Oficios. Para cuando llega ese momento muchos ya abandonaron y otros tienen que trabajar para independizarse.

Lucas dijo...

Yo ya sé que es lo mío. Me interesa estudiar todo lo referente a la mujer.

Anónimo dijo...

Por qué para ustedes los psicoanalistas todas las cosas buenas son impulsos sexuales?

M. José dijo...

Le digo al Anónimo, que también para ellos las cosas malas son sexuales. Tienen el cerebro invadido.

Tatiana dijo...

la parte que más me gusta de la única misión es divertirme
para conservarnos tenemos que divertirnos, no?

Carolina dijo...

Alguien podría explicarme qué diablos es la sexualidad!!!

Ignacio dijo...

Se lo he dicho a muy pocas personas. Personas de mi confianza. Es algo que me hace sentir muy mal. Aún hoy siento la humillación de ese momento. Me cuesta decirlo por este medio. Firmaré con un seudónimo.
Bueno.
En el colegio un cura me violó.

Emiliano dijo...

Me gustaría cumplir misiones menos comunes. Como ser del contraespionaje.

Vladimir dijo...

Yo defenderé la vida de la especie a capa y espada.
Las armas biológicas carecen espíritu heroico.

Juan dijo...

Mi sueño era tener un criadero de gatos; por supuesto que me mandaron a la escuela y el liceo para que fuera un ciudadano útil a la sociedad. En mí nadie pensó.