lunes, 11 de abril de 2011

Un solo cónyuge y un solo Dios

La monogamia fundamentalista, los celos radicales y la furia desproporcionada ante las infidelidades, están justificados y reforzados fuertemente por el monoteísmo impuesto en el primero de los diez mandamientos.

El sentimiento de monogamia es muy fuerte y popular. La creencia en Dios también es muy fuerte y popular.

Diría que la mayoría de las personas desean la monogamia y de alguna forma creen en Dios.

Seguramente los diez mandamientos están ubicados en orden de importancia y no es casual que el primero refiera a que Dios tiene que ser uno solo («Amarás a Dios sobre todas las cosas»).

Por lo tanto es posible concluir que la relación de cada ser humano con Dios es y tiene que ser monogámica.

Si pudiéramos pensar a Dios como un ser humano, entonces tendríamos derecho a decir que Él es celoso. El primer punto del contrato religioso (los diez mandamientos que los creyentes aceptan) es la radical exclusión de otros dioses en la adoración de los mortales.

También es posible pensar que el arraigo y popularidad de esta creencia en un ser superior tiene como una de sus causas el hecho de que cada uno tiene la libertad de diseñar al Dios que más le conviene.

Si bien Dios es uno sólo, también es cierto que si pudiéramos ir al fondo del asunto, tendríamos que reconocer que cada uno cree en Él de una manera personal.

Los teólogos son estudiosos que han logrado encontrar cuáles son las características que todos le atribuyen a ese ser superior (omnipotencia, justicia, inmortalidad). Gracias a estos criterios unánimes es que pueden juntarse muchos creyentes en una misma institución eclesiástica (católicos, protestantes, judíos).

En suma: La fobia universal a compartir con otros a nuestro cónyuge, se refuerza con la creencia en un Dios que nos exige monogamia y fidelidad.

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9 comentarios:

Alicia dijo...

En catecismo (yo estudiaba en un colegio católico) nos enseñaban que Dios ama a todos los hombres y al mismo tiempo, a cada uno en particular, como si fuera su hijo único.
A su vez, nosotros los 'fieles', debíamos amar a un sólo Dios. Esto quería decir, por un lado, que debíamos abrazar los preceptos cristianos y lo que conllevan (por ej, no se puede amar a Dios y al dinero. El dinero no puede ser tu Dios). Por otro lado significa que se trata de una religión monoteísta, donde todo poder y toda virtud se concentran en un sólo Dios.
Lo que me interesa más de esto es el siguiente mensaje: Dios sí puede amarnos a todos y a cada uno en particular, pero nosotros los humanos, sólo podríamos amar a un Dios. Dios es omnipotente y nosotros nacimos pecadores. Apenas podemos tratar de no seguir pecando demasiado.
Ubicados en este lugar, pretender amar como Dios - a todos y a cada uno - sería, desde esta lógica religiosa, pecar de sobervia.
Por lo tanto concuerdo ampliamente con sus planteos una vez más.

Luján dijo...

Algo no concuerda con lo expuesto por Alicia. Jesús dijo "ama a tu prójimo como a ti mismo". En esta frase queda implícita la posibilidad de los seres humanos de amarse todos por igual.

Ariel dijo...

Claro que Dios exige monogamia: dicen los mandamientos "no desearás la mujer del prójimo" (prójimo significa aquí próximo).

Lucas dijo...

Lo que sucede es que se separa el deseo del amor. Tenés que amar a la mujer de tu vecino pero sin desearla.

Javier dijo...

Si la mujer de mi vecino fuera mi hermana, podría amarla sin desearla. Si fuera la viejita que resultó ser mi primer maestra, también. Pero si fuera en todos los sentidos, una bellísima mujer, la amaría, la desearía, y reivindicaría mi derecho a sentir de ese modo.

Cacho dijo...

La verdad es que yo prefiero tener por un lado la licuadora, a parte la juguera y la batidora. Las multiprocesadoras no rinden.
El monoteísmo tampoco. Por eso los católicos tienen un montón de santos que se especializan en distintos menesteres. Para las cuitas de amor está San Antonio. Para pedir trabajo San Cayetano. San Jorge para pedir protección, y así tantos más de los que no tengo ni idea.

Marta dijo...

Lo felicito por el artículo. Ud establece conexiones muy acertadas.

Tiago dijo...

Ahora me cierra... Lo que dice Cacho explica por qué se tolera que exista una esposa y varias amantes.

Chapita dijo...

En la lista de los mandamientos para el almacén, lo primero es traer pan y agua, y dios se queda contento.